Una familia para el pueblo de Santiponce.
Mientras se ultima la memoria del I Festival Romano de Santiponce, Itálica Despierta y se hace acopio de todo el material audiovisual del evento, hemos creído oportuno publicar algunas de las imágenes de la sesión fotográfica de la cual salió no solo el cartel anunciador oficial del mismo, sino también algunas de las publicaciones previas en redes.
Todo ello en agradecimiento y reconocimiento, a las y los modelos que soportaron estoicamente las muchas incomodidades que conlleva este tipo de actividad.
Los esclavos.
Empezamos la lista de agradecimientos con nuestros dos esclavos preferidos, que a pesar de ser apresados en ese mismo momento y sin oponer resistencia, se brindaron de forma abnegada a realizar las labores encomendadas.
Gracias Antonio G. Jaime como siempre por estar ahí y por prestarse a todo lo que haga falta. Gracias a Eduardo Casas por ser el Magíster perfecto. No hay nadie mejor que pueda encargarse de la educación de unos hijos, o mejor, de unos nietos. Y gracias a Elena Holguín. Una familia Holguín que es capaz de lucir con la misma nobleza un traje imperial que una humilde saya. Es lo que habitualmente se suele llamar, SENCILLEZ, GENEROSIDAD Y EJEMPLO.
La Familia Romana.
La temática escogida para este primer festival era la familia romana y su vida en una gran domus, como así eran las numerosas edificadas en la Itálica Adrianea. Para ello, nada mejor antes que nada, que dar imagen a la nuestra. De tal forma que necesitábamos un Páter Familias, una Dómina, y unos cuantos hijos de varias edades.
Gracias Juanjo por el fantástico papel realizado, por aguantar durante más de dos horas la sensación de ser un flamenquín cordobés embutido en esa toga kilométrica.
Gracias a los niños, a los propios y a los adoptados que pusieron el complemento perfecto; Arturo, Alfonso, Rodrigo y Ricardo muy correctos y aplicados , haciendo honor a la realeza de sus nombres (se merecen un millar de comodines por lo menos).
Gracias también a Piluca que aunque no posó, se ocupó de la producción con su habitual y contagiosa hiperactividad y por implicar nuevamente a su familia al completo. Si hay una familia romana es la de los Ceballos Inés.
Y gracias cómo no, a Dómina Alicia, por apoyarme en mis historias y por haber esperado 36 años hasta ver cumplida la promesa de un joven adolescente de ser la dueña algún día de una gran mansión. Bueno, no exactamente. ¿verdad? , hummm...., dice que seguirá esperando y que se queda con la magnífica compañía y el buen ratito pasado.
LAS ESCENAS
El Páter Familias comienza el despacho diario recibiendo en el patio a distintas personalidades y ciudadanos.
El Magister impartiendo la enseñanza a los hijos y esclavos.
Culto en el altar a los dioses lares, protectores del hogar y honra a los antepasados.
La cocina
El acicalamiento en aposentos.
La cena en el Triclinium
La tabernae
Los juegos romanos
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