Asociación Amigos del Monasterio-Centuria Romana de Santiponce

Si hay algo seguro que hacemos a diario es crecer, y aprender. También y según corresponda a nuestra edad, envejecer y enseñar. Igualmente, aunque esto no es demostrable, cada día amamos u odiamos, y creamos o destruimos, según corresponda también a nuestro afán por mejorar el mundo y a sus habitantes. En la mañana de ayer sábado, nuestro insigne artista Fernando Marmolejo nos ofreció en el Museo Municipal de Santiponce, una clase magistral sobre técnicas y materiales del noble arte de la Orfebrería. Y lo hizo con los que a buen seguro son los mejores alumnos posibles, nuestros niños. Alguien dijo una vez que la belleza, el arte y la cultura hacen mejor al ser humano, lo hacen más... humano. Así que no podemos sino darnos nuestra más sincera enhorabuena por iniciativas como esta que consiguen, desde el respeto y admiración a nuestros artistas, contribuir en cierto modo a mejorar la sociedad. Quizás sea solo sea un golpe de los muchos que hacen falta para convertir un trozo de meta