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Prestos y dispuestos. La Centuria y su gente nunca se fueron.

Con el avance de la desescalada, nuestra Asociación empieza a estar más visible. La reapertura de la atención al público de nuestra sede en la Plaza de la Constitución, así lo atestigua. Pero ni en los peores días de confinamiento, hemos dejado a un lado nuestras preocupaciones por los dos excepcionales Patrimonios de Santiponce, el Monumental y el Ciudadano. Una vez superado lo más duro, podemos manifestar abiertamente que hemos vuelto. Con la cautela y precaución que nos exigen. Con la responsabilidad y entendimiento que nos exigimos.
Este azote padecido nos está robando muchas oportunidades en las que disfrutar esta pasión a la que nos hemos encomendado, y lo peor de todo, se nos ha llevado a uno de nuestros incondicionales.
Vendrán días. Mientras vienen, La Centuria y toda su gente, aquí está esperando, cargada de ánimo para guardarte y hacer que tu historia siempre regrese.

Aunque vista la naturaleza indómita
de musgos mis calzada…
Aunque la luz no se deslice a media tarde
en el cuerpo femenino de mis mármoles…

Aunque la cintura de las galerías se ajuste
con sus piedras a la soledad de las batallas…
Aunque el eco de las sombras no proyecte
su canto de glorias apagadas…

Aunque los fosos y las arenas no guarden
temblores de sol en las espadas y en los ánimos…
Aunque la tierra dura, en su recuerdo de ciudades
no se desplace ni remueva sus calladas piedras…

Aunque no haya belleza entrecortada en las alturas
divisando la infinitud de los imperios…
Aunque se represente la función de la nada
dn el graderío impaciente y descansado…

Aunque nadie desfile, nadie cante, nadie combata,
nadie camine, nadie quiera, nadie abrace, nadie sienta…
Será nuestra vida quien te salve, y será tu luz quien nos convenza.
Será nuestro ánimo quien te guarde, y será tu historia quien regrese.

(Manu Lamprea)

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