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Conciencia y Responsabilidad. Belén Nazareno 2018 Santiponce

(Foto: Alejandro Vega)
Llamamos Conciencia al conocimiento responsable y personal de una cosa determinada, como un deber o una situación y Responsabilidad a la forma de actuar conforme a ellas. Pues básicamente la participación de la Centuria Romana de Santiponce en el Belén Nazareno 2018 ha supuesto un año más un verdadero y completo ejercicio de ambos conceptos.

La repercusión que para Santiponce supone este acontecimiento, la participación activa de algunos de nuestros asociados en la iniciativa de recogida de firmas (más de 1600) para la declaración de Itálica como Patrimonio de la Humanidad, la ambientación en el Mercatus Romanus en la Plaza, y a nivel particular de cada uno de los que participamos, supone una experiencia sensitiva y personal que no hace sino alimentar nuestra lucha y nuestro deber de no dejar de lado a nuestro pueblo.
Y es que para eso, realmente, estamos, para estar con todos y para todos. Estamos con los niños que nos vieron y depositaron en nuestras corazas su frágil protección y su infancia recién estrenada en estas fechas y mientras un solo niño siga gritando ilusionado "ahí vienen los romanos", los romanos seguirán acudiendo. Por supuesto, estamos con la Hermandad que trabaja activa e incansablemente por su bolsa de caridad y que ha convertido su Belén nazareno en una atracción turística más para el pueblo, uno de los puntales básicos del proyecto de nuestra Asociación. Estamos para los emprendedores que han apostado en el Mercatus por ofrecernos sus proyectos de presente y futuro. Estamos por los representantes del pueblo que nos necesiten y estamos por los que han estado en el stand de firmas recabando adeptos, reclutando nuevos soldados de la causa y no han dejado de gritar para que se nos escuche hasta en Nueva York, próximo destino de nuestra Itálica.
Es tiempo de tregua navideña y haciendo balance del año, nuestra Asociación se siente cada vez más querida y respetada. Pero llegará enero y con él retomaremos la lucha. No olvidamos que somos soldados y que nos debemos a la defensa de lo que consideramos que es nuestro. Se auguran próximas batallas que librar en el Monasterio y vamos a necesitar de todos los Amigos hechos...del Monasterio.

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